Y entonces, si somos tan buenas para gestar y crear nuevas cosas, belleza, ingenio y productos hermosos… ¿por qué el mundo del emprendimiento no es gobernado y liderado por las mujeres?
De acuerdo con un estudio lanzado por Pitchbook y el National Venture Capital Association, el 2018 fue un año récord en Estados Unidos en cuanto a capital de riesgo invertido en empresas tempranas, con la cifra más alta de la historia: $131 mil millones de dólares.
Sin embargo, advinen qué porcentaje fue invertido en empresas lideradas por mujeres. Recuerden, estamos en Estados Unidos, que uno pensaría que ya muestra más equidad que los países supuestamente “menos desarrollados.” (Ese término y su debate merece otra entrada en este blog, pero es increíble cómo los términos se van solidificando, continuando todo un juego de poder y competencia, ¿no creen?)
Bueno, al ver que Estados Unidos es de los lugares más desarrollados en cuanto a emprendimiento, la primera vez que leí el artículo pensé que… pues, el 30% habría sido invertido en empresas lideradas por mujeres.
Ni tibia estaba…
El Artículo: Menos…
Yo: bueno, el 10% entonces.
El Artículo: Mucho menos…
Yo: Recórcholis, ¿en serio? ¿En serio dije recórcholis?
Bueno…
¿El 5%?
El Artículo: Menos de la mitad….
Yo: No me jodas…
El Artículo (de manera aplastante): El 2.2%.
Yo: ??????
Tan solo el 2.2% ha sido invertido en empresas lideradas por mujeres. Y solo el 20% en emprendimientos donde hay al menos una mujer en el equipo de emprendedores.
No puede ser. Si las mujeres somos tan talentosas y creativas, y MUY emprendedoras (¡tan solo entren a una red como Merakiu para ver la creatividad e imaginación tan desbordante nuestra!) ¿Por qué el mundo de la inversión y del aval institucional está tan cerrado para las mujeres? Porque el llegar a recibir el tan apetecido capital de uno de estos fondos, no es sólo por el capital que recibes, sino por la validación en el mercado, la mentoría y asesoría, y los contactos que te ayudan a impulsarte al siguiente nivel.
Creo que debemos cambiar paradigmas y expandir nuestra fuerza creativa para derribar las paredes que nos limitan. ¿Y tú, qué vas a hacer con tu superpoder de la creatividad? Te invito a abrazarlo para activarte como emprendedora con propósito con mi curso: ¡Actívate, Mujer Emprendedora y Creativa, acá.